POLLO GUISADO CON CHAMPIÑONES 

Si ayer tocó pescado, hoy toca carne sana y ligera como es el pollo. No me digáis que no os cuido con mis recetas, eh? jeje... La verdad es que no soy de comidas muy copiosas o pesadas, aunque a veces apetezca algún plato contundente o un postre, que ahí si que por mucho que intentes aligerarlo siempre engorda, pero está tan bueno.....Este plato les encanta a mis hijos y se come bastante a menudo en casa. Es cierto que no es una receta para nada espectacular, ni tiene mucha filigrana, al contrario es bastante sencillo y con muy pocos ingredientes, pero os aseguro que más bueno está el pollo y con unas patatas fritas o una buena ensalada, tendréis una comida de rechupete. Aquí os dejo la receta...

1 kg de contramuslos deshuesados o un pollo entero troceado
250 gr de champiñones al natural o una lata grande de champiñones enteros
1 diente de ajo
1 vaso de cerveza
150 ml de aceite de oliva
Azafrán
Pimienta negra en grano
Agua
Sal

Lo primero será trocear los contramuslos una vez que les quitemos la piel y la grasa. También podéis usar un pollo entero troceado. Reservamos. Limpiamos los champiñones y los laminamos. Los metemos en agua para que suelten toda la tierra que tengan. En una cacerola pondremos aceite a calentar. Echamos el ajo pelado y entero. Cuando esté dorado, con cuidado de que no se nos queme, añadimos el pollo. Lo rehogamos hasta que cambie de color. Escurrimos los champiñones del agua y los incorporamos a la cacerola. Si usáis de lata, agregadle también el caldo que contienen. Volcamos el vaso de cerveza, un poco de azafrán, la pimienta en grano, agua hasta que cubra el pollo y sal.



Lo dejamos guisarse hasta que reduzca todo el líquido y se quede en el aceite inicial. Cuando el pollo comience a dorarse, ya estará en su punto. Fácil, porque prácticamente se hace solo y de sabor, estupendo. Buen provecho!



Comentarios